La gastronomía nacional está compuesta por una amplia gama de comidas típicas de El Salvador, las cuales son degustadas por personas nacionales y extranjeras cada día. Algunas de estas comidas son preparadas en alguna época específica del año, ya sea porque los ingredientes se encuentran solo en ese tiempo o porque son asociados a tradiciones populares.
Sin duda alguna que no podríamos vivir sin estas deliciosas comidas típicas salvadoreñas, algunas de ellas han sido transmitidas de generación en generación en la cocina salvadoreña como una muestra de nuestras tradiciones culinarias y también de lo deliciosas que son.
Se trata de un delicioso plato de yuca frita, o raíz de yuca, que es ligeramente dulce y bastante masticable. La yuca se corta en trozos y se fríe. Algunas personas prefieren hervirla. Se puede servir con pepescas (un pequeño tipo de pescado, que se fríe), o con chicharrón (chicharrones de cerdo fritos, que en realidad se fríen en su propio aceite). También puede servirse con salsa de tomate y curtido (ensalada de col fermentada).
Se elaboran con masa a base de maíz, que se envuelve en una hoja de huerta y se cuece al vapor por horas. Hay diferentes tipos de tamales según la forma de preparar y sazonar la masa. Por ejemplo, el tamal tradicional se rellena con salsa de tomate, verduras y pollo o cerdo. También hay tamales pisques, que se rellenan con frijoles refritos.
Los pastelitos salvadoreños se preparan con masa de maíz y polvo de achiote y especias. Estos pastelitos se rellenan con picado de verduras con carne y se fríen. Se pueden servir con salsa de tomate y curtido.
La mazorca de maíz hervida o asada es perfecta para el antojito de la tarde y se prepara con salsas bastante singulares, salsa de tomate, salsa negra, mostaza, mayonesa, (de ahí su nombre: elote loco).
Las empanadas son uno de los postres salvadoreños más deliciosos. Con su textura suave y su sabor dulce, son perfectas para el desayuno o la cena. Se hacen con una base de plátano frito, que se rellena con frijoles fritos o leche. Usualmente se envuelven en azúcar.
Delicioso y tradicional plato salvadoreño dulce. Hay tres tipos principales de nuégados. Los de yuca se preparan con raíz de yuca, sal y aceite. Los de masa de maíz que se mezclan con sal y aceite y están también los nuegados de huevo que se mezclan con harina, levadura, sal y agua; se fríen y se sirven con miel, que se hace con panela (azúcar de caña integral sin refinar) y agua.
Típicas en la Semana Santa. Se hacen con Torta de Yema que se corta en rebanadas gruesas y se empapan en una mezcla de huevos, leche, canela, azúcar, sal y aceite. Se fríen las rebanadas y se dejan en remojo en un almíbar hecho con dulce de panela, o azúcar de caña integral sin refinar.
Aunque tiene su origen en la cocina española y es bastante sencillo de hacer. Sólo se prepara una mezcla de arroz, azúcar, canela y leche, se hierve hasta que esté blando y se puede comer caliente o frío.
Preparado con maíz fresco que se mezcla con azúcar, canela, sal, leche y agua. Es dulce y tiene una consistencia espesa. Esta popular bebida salvadoreña tiene su origen en la cocina maya.
Es una bebida espesa y nutritiva hecha con semillas de jícaro y sésamo, arroz, cacahuetes, leche, canela y vainilla. Es dulce, cremosa y refrescante.
Como puedes ver, la cocina salvadoreña está llena de historia y tradición. La influencia indígena sigue estando muy presente en la mayoría de sus comidas, postres y bebidas. Sin embargo, muchos platos reflejan la mezcla de las tribus indígenas y los colonos europeos. Asegúrate de disfrutar de la mayoría de estas comidas si alguna vez visitas este hermoso país centroamericano.